El Estado ausente

   

   Frente al Shopping de los usados en José C. Paz, haciendo de auditorio la iglesia evangélica Restauración 2000, colmada ante mil personas, el candidato a vicepresidente por el Frente Popular Mario Das Neves, realizó la presentación de la fórmula por dicho distrito, que llevará a Carlos Duarte como intendente, y a Gustavo Ramos como primer concejal.

  Con bombos y trompetas en la calle entonando melodías populares y dándole color a la espera, familias, jóvenes y niños correteando, esperaban la llegada de Das Neves y Carlos Duarte. Gustavo Ramos, caminado entre la gente, nos dice que es una presentación “íntima”, que se invitó a la gente del barrio, amigos. Acá no hay clientelismo de baja estofa funcionando, acá es la gente movilizándose por sus propias ganas.

   Adentro de la iglesia, un cantautor de folclore agita con sus canciones. Los presentes toman gaseosas de segundas marcas en vasitos de plástico y disfrutan del show. Se respira peronismo, fiesta del pueblo. También se respira la pobreza, la exclusión llevada adelante por el olvido, la corrupción y la inoperancia de sucesivos gobiernos. José C. Paz, al noroeste del conurbano, uno de los partidos más carenciados y necesitados de la provincia.

   Y en ese reducto de los olvidados (los olvidados del intendente Ishii, del gobernador Scioli y de la presidenta: una especie de santísima trinidad K que sigue empobreciendo a los más pobres), allí los vemos hablar sobre un modesto estrado de madera, primero a  Gustavo Ramos, luego a Carlos Duarte, y por último a Mario Das Neves, quien pronunció un discurso enérgico y sumamente crítico hacia esa  mera chachara demagógica progresista K. “No puede haber en un país en crecimiento como la Argentina un 38% de trabajo en negro”. “Después de ocho años de crecimiento de los índices económicos hay mayor concentración y desigualdad; la igualdad es mayor distribución, mayor equidad”. También se refirió a que en su provincia, la de Chubut, donde es Gobernador, los jubilados cobran el 82% móvil.

    Y acá por su parte el supuesto gobierno progresista veta el 82% siendo que cuenta con muchos mayores recursos.

    
   Si hay algo que sobra en José C. Paz, son afiches del actual intendente Ishii postulándose para gobernador de la provincia de Buenos Aires: esa, es la única “obra pública” que se deja ver. Plata para la obscenidad política siempre hay; de la gente necesitada que espera la intervención del Estado para mejorar su calidad de vida, bien gracias. Como bien refirió Mario Das Neves, “Primero está la gente necesitada, porque el Estado tiene que estar donde se necesita; mientras haya un chico pobre hay que seguir luchando, sino para qué estamos aquí”.

   Esto es peronismo auténtico, intervenir sobre los sectores mas carenciados y necesitados, atender sus reclamos, darles cloacas, agua potable, salud y educación digna, y parece mentira que en el inicio de este Siglo XXI esos derechos básicos aún no se hayan saldados, y mas si nos ponemos a observar los datos macroeconómicos de crecimiento del país del 2003 para acá. Está claro que recursos no faltan, y lo que sobra son manejos inescrupulosos de dinero, corrupción y clientelismo militante.

   Al final del acto, suena una vez más entre el clamor de la gente la marcha peronista, para recordarnos de algún modo, que la esperanza es lo último que se pierde, que el cambio siempre es posible, y que es lo que nos moviliza.